Probablemente llegas una edad en la cual crees saber todo sobre sexo y los orgasmos que conlleva.

Pero un orgasmo no es nada más la cúspide del placer sexual, porque de hecho, también tiene sus secretos. Si, así como lo lees, el arte del orgasmo también tiene particularidades que probablemente no sabías que existían, el día de hoy te vamos a contar 10 cosas que probablemente desconocías de los orgasmos.

Síndrome de Excitación Sexual Persistente: Este extraño desorden mantiene a las mujeres en un constante estado de excitación sexual, causando que tengan hasta más de 100 orgasmos al día. Las causas de estos pueden ser impredecibles, ya que la más mínima provocación, puede terminar en un orgasmo.

Parecerá un sueño hecho realidad, pero imaginen tratar de vivir su vida sin poderse concentrar correctamente, o incluso tratar de contener una sensación de esa magnitud en público. Ya no es tan bonito, ¿verdad?

Orgasmos médicos: En el siglo XIX, el 75% de las mujeres padecían una mal que les causaba ansiedad e irritabilidad. La supuesta enfermedad fue denominada como histeria, pero el día de hoy es simplemente diagnosticada como frustración sexual.

Debido a que en el pasado la excitación sexual era algo que no se discutía, la condición se consideraba médica en vez de sexual, por lo que las pacientes necesitaban tratamiento. Este implicaba profesionales que dieran a las mujeres masajes genitales hasta que alcanzaran un orgasmo.

De hecho, los vibradores se inventaron como manera de auto-medicarse, debido a que los doctores consideraban la labor de llevar a la mujer al clímax como algo que consumía mucho tiempo.

Los orgasmos son analgésicos: Durante un orgasmo, el cerebro libera endorfinas, las cuales actúan como poderosos analgésicos. Un estudio liderado por el neurólogo alemán Stefan Evers, reveló que la actividad sexual ayuda mucho para aliviar el dolor.

No siempre es necesaria la estimulación genital: Aunque el clímax es comúnmente alcanzado mediante la actividad sexual, no es la única manera en que esto es posible. Algunos sexólogos han descubierto que el cerebro puede mandar señales al cuerpo para conducir a un orgasmo sin el uso del contacto genital. Por ejemplo, en 1950 descubrieron que una mujer podría conseguir llegar a un orgasmo si se frotaba las cejas.

Cáncer de próstata: Investigadores de la Escuela Médica de Harvard, aseguran que tener orgasmos con frecuencia, reduce las posibilidades de desarrollar cáncer de próstata. Se dijo que el hecho de desechar esperma previene la acumulación de células viejas que tienen altas probabilidades de ser carcinóginas.

Teorías sobre el embarazo: En la primera década de 1900, los ginecólogos creían que el orgasmo femenino era prerequisito para concebir un embarazo. Aunque en 1950, se probó que era falso, la teoría aún se usa para la crianza de cerdos.

La eyaculación más lejana: En los 40’s, algunos científicos creían que la fuerza con la que el semen era disparado hacia el cérvix uterino, era un factor para la fertilización exitosa.

El Dr. Alfred Kinsey, un reconocido sexólogo, dudaba de esta teoría y realizó una investigación en la que reunió a 300 hombres y midió las distancias que alcanzaba el semen al eyacular. Muchos no llegaron muy lejos, pero uno alcanzó a disparar hasta 2.5 metros.

Esto dio como resultado que muchos hombres intenten romper el Récord Guinness en la actualidad, el cual es te 3 metros.

Estornudos incontrolables: Algunas personas sufren de una extraña condición, la cual las hace estornudar de una manera incontrolable, durante y después de un orgasmo.

Una investigación dirigida por los doctores Mahmood Bhutta y Harold Maxwell en 2008, reveló que la condición era un defecto genético, el cual causaba que los nervios que causan los estornudos y los orgasmos, estuvieran totalmente ligados.

Orgasmos en muerte cerebral: Cuando una persona es mantenida viva gracias a un respirador artificial, los nervios permanecen oxigenados. Si se estimula el lugar correcto, el reflejo de Lázaro puede ser provocado en una persona con muerte cerebral, lo que causa que ponga los brazos sobre su pecho.

El punto de origen para un orgasmo, es llamado raíz del nervio sacro, la cual es encontrada en la columna vertebral. Si esta es estimulada, se puede alcanzar el clímax.