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Desde los años sesenta, Sutherland dio vida a una multitud de personajes, incluidos villanos, protagonistas y antihéroes. Uno de sus papeles más icónicos fue el de Coriolanus Snow en la exitosa saga “Los juegos del hambre”.
La noticia fue difundida por “Variety”, un sitio especializado en cine, que no dio detalles sobre el motivo del deceso. Minutos más tarde, el portal “Lad Bible” indicó que su partida se produjo después de una dura batalla contra una enfermedad no especificada.
Donald SutherlandSin embargo, no hay fuentes oficiales que confirmen esta información. “Variety” también informó que el actor será despedido en un pequeño funeral familiar.
Donald Sutherland y su papel en Los Juegos del Hambre
La versatilidad de Sutherland para interpretar personajes con gran complejidad psicológica le ganó el reconocimiento del público, que hoy lamenta su pérdida. Aunque en los últimos años fue más conocido por su papel como Snow, al inicio de su carrera fue considerado uno de los representantes del cine contracultural, destacando en películas como “The Dirty Dozen” y “MASH”.
Gracias a su indiscutible talento, Sutherland fue galardonado con premios como el Emmy y el Golden Globe. El canadiense describía sus inicios en el cine como “una pequeña carrera serpenteante”, sin imaginar que en pocos años su nombre estaría en los créditos de las películas más famosas.
Su gran oportunidad llegó con “The Dirty Dozen” en 1967, una película que retrata la iniciación de 12 de los criminales más peligrosos en el ejército estadounidense, con el objetivo de atacar una fortaleza nazi. En esta cinta, dirigida por Robert Aldrich, Sutherland interpretó a Vernon L. Pinkley, conocido como el “prisionero 2”.
En 2005, Sutherland contó a “The Guardian” que inicialmente su papel solo incluía una línea. Sin embargo, cuando un compañero se negó a imitar a un general durante una escena, Aldrich le pidió a él que lo hiciera. “-¡Tú!, ¡el de las orejas grandes!, ¡hazlo tú!”, rememoró Sutherland.
A lo largo de su carrera, compartió créditos con grandes actores y actrices como Jane Fonda, John Cassavetes y Clint Eastwood. En los setenta, Sutherland y Fonda tuvieron una relación amorosa, unida por intereses comunes como el activismo. Este interés lo llevó a involucrarse en el movimiento “Vietnam Veterans Against the War”, oponiéndose a la participación estadounidense en la guerra de Vietnam.
Sutherland fue parte de una revista
Junto con Fonda y los actores Peter Boyle y Howard Hesseman, Sutherland fundó la revista “Free the Army”, lo que les valió la vigilancia del FBI.
A pesar de la edad, su carrera continuó con éxito en los 2000, destacando en películas como “Space Cowboys”, “Orgullo y prejuicio”, “An American Haunting” y la saga de “Los juegos del hambre”.
Donald Sutherland deja atrás a su esposa Francine Racette, su hija Rachel y sus hijos Roeg, Rossif, Angus y Kiefer. Su legado perdurará en la historia del cine, donde su talento y versatilidad serán recordados por siempre.